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La vida y otros cuentos

Viaje a los Fiordos

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Después de contratiempos inesperados que hemos tenido este verano, finalmente, hemos podido hacer este viaje que desde hace tiempo queríamos realizar.

Día.-1 Tomamos el vuelo con destino a Oslo, capital de Noruega.

Ha sido un vuelo muy tranquilo llegando antes de la hora prevista. Y he sentido un placer inmenso, ver nuevamente las nubes, desde la ventanilla del avión, como si fueran algodón, como si fueran nieve, volviendo a disfrutarlas.

Salimos del aeropuerto y nos estaba esperando el guía que íbamos a tener durante todo el viaje. Nos recibió un clima diferente al que habíamos dejado en Madrid con nubes oscuras que presagiaban lluvia. Nos fuimos conociendo todos los que íbamos a formar parte del grupo durante el viaje. Subimos al autocar con dirección a Hamar, primera parada en esta ciudad de entrada a los fiordos.

Hamar es una ciudad que tiene el lago más grande de Noruega, el lago Mijosa. Hace años era una importante ruta de transporte, hoy es solo navegable para barcos de placer y rutas de turismo. Se fundó por primera vez en el siglo XI, como ciudad residencial de obispos. Fue la única ciudad medieval en Noruega. Cuando llegamos, aunque estaba lloviznando pudimos dar un paseo por la orilla del lago y caminar por la ciudad que es la más grande del interior del país.

Después del paseo y de acomodarnos en el hotel, pasamos a la cena con una agradable conversación de todos los componentes del grupo.

Día 2.- Laerdal. Comenzamos el día con un típico desayuno escandinavo y nos dirigimos a la Noruega más bella, hacia Laerdal, en pleno corazón del fiordo de los Sueños. Durante el trayecto, nos explica el guía que Noruega tiene cinco millones y medio de habitantes y es un país en el que solo el 3% se dedica a la agricultura. Su principal riqueza es el petróleo y tiene noventa y seis mil lagos. Pasamos por el túnel más largo de Europa con 24 kilómetros y medio de longitud.

Las casas de madera son una de las construcciones más típicas de Laerdal. Hoy son tiendas de decoración y restaurantes. Imprescindible visita a la iglesia de madera de Borgund. Impresionante construcción que data del siglo XII y es de las pocas iglesias de madera que quedan en el país.

Seguimos el camino para comer en Gudvangen y hacer el crucero por el fiordo Sognefjord, o fiordo de los Sueños. Este pequeño pueblo es muy popular para el turismo, ya que es un puerto de escala para el recorrido de los fiordos.

La comida ha sido muy divertida y cada vez vamos cogiendo más confianza en el grupo. Un vez finalizada, vamos hacia el puerto. Este fiordo es el más largo y profundo de Noruega con 1.308 metros de profundidad. Nos ofrece unos paisajes impresionantes que nunca antes habíamos contemplado.

Dos horas disfrutando de un espectáculo de naturaleza nunca visto y la llovizna que ha caído durante todo el día, nos ha respetado.

Sigue la belleza del paisaje en el hotel que nos alojamos en Laerdal, que está a los pies del fiordo, con unas vistas maravillosas y una cena fantástica.

Día 3.- Tren de Flam Después de un descanso reparador y un buen desayuno, salimos para hacer la excursión del tren de Flam. Durante el trayecto seguimos disfrutando del precioso paisaje que nos rodea. Las nubes queriendo quedarse entrelazadas en las montañas y un cielo azul queriendo abrirse paso.

Llegamos a Flam, un pequeño pueblo situado al fondo del fiordo Aurlandsfjord rodeado de paisajes maravillosos. Fuimos a la estación donde nos estaba esperando una de las principales atracciones del país, la excursión en el famoso Tren Flamsbana. Se dice que es uno de los viajes en tren más bonitos del mundo. Comenzó su construcción en el año 1923 y terminó en 1940. Parece ser que es una de las mayores obras de ingeniería de Noruega.

Acomodados, ya en el tren, comenzamos la excursión que tiene una duración de una hora y va desde el nivel del mar de Aurlandsfjord hasta la estación de montaña Myrdal situada a 866 metros sobre el nivel del mar. Es un viaje para los sentidos. El tren hace parada en La cascada Kjosfossen, impresionante, donde podemos contemplar la caída continua del agua a la vez que una bailarina vestida como un legendario Huldra, canta y baila una típica canción noruega frente a la cascada. Durante los veinte kilómetros de viaje, atravesamos un buen número de túneles que atraviesan las montañas y la mayor parte del trayecto discurre por una pendiente de un 5,5%. Desde la ventanilla admiramos paisajes salvajes, únicos, ríos caudalosos con grandes desfiladeros, montañas y casitas en los bosques siendo de lo más bonito de los fiordos noruegos. Coincidimos todos en que ha sido una excursión inolvidable.

Continuamos viaje hacia Bergen, corazón de los Fiordos.

Bergen tiene 275.000 habitantes y es la segunda ciudad más grande del país, donde llueve, al menos, 200 días al año. Tuvimos suerte cuando la visitamos porque el sol fue protagonista con buena temperatura. Tiene a su alrededor siete montañas y está bañada por dos fiordos. La mitad del centro de la ciudad es terreno quitado al mar. Es una ciudad con mucho encanto y muy urbanita al tener un número importante de estudiantes, lo que garantiza gran ambiente en los bares y terrazas al aire libre.

Disfrutar de toda la ciudad desde el mirador del monte Floyen es una de las maravillas que podemos contemplar. Otra maravilla son las casas Hansas, casitas de madera de colores tan características de Bergen que están en el barrio llamado Bryggen desde el siglo XIV. En aquella época eran residencia de «el Hansas», un gremio de comerciantes de bacalao. Hoy el barrio es Patrimonio de la Humanidad y las casas están dedicadas a tiendas turísticas y restauración.

Otro sitio que no hay que perderse es el Mercado del Pescado. Está en el puerto de la ciudad con una gran animación de puestos y terrazas para degustar pescado del país, como el salmón o la ballena. Hay puestos en los que tienen huevas del más variado pescado envasadas al vacío para poder llevarlas sin que se estropeen. Pasamos una tarde muy agradable degustando esos productos.

Día 4.- Nos disponemos a continuar disfrutando de este viaje tan especial en cuanto al paisaje, al clima, que nos está respetando, y al grupo de compañeros y compañeras con los que compartimos, risas, charlas, comidas. Ha sido una suerte que no siempre se da.

Hoy nos adentramos en la región de Geilo, una zona de montaña muy reconocida por las estaciones de esquí. En el trayecto, seguimos quedándonos impresionados con la belleza del paisaje. Las cámaras de los móviles no dan a basto para guardar tanta belleza.

Hacemos una parada para ver la cascada Voringfossen, situada en lo más alto de Mäbodalen en el municipio de Eidfjord. Tiene una caída de 182 metros con caída libre de 145 metros. Está considerada como una de las mas bellas de Noruega. El gran puente peatonal escalonado que tiene sobre la cascada dicen que es solo para valientes y nosotros lo fuimos. A 150 metros de altura tuvimos unas vistas excepcionales aunque con algo de inquietud al sentir el puente moverse. Simplemente, espectacular.

Continuamos el viaje para comer en Geilo, una localidad rodeada de cordilleras montañosas que en inverno se convierte en estación de esquí. Nos deleitan con una comida estupenda y un salmón exquisito. Al finalizar damos un paseo por los alrededores viendo el bonito paisaje de las pistas de esquí que ahora, en verano, están llenas de vegetación.

Llegamos a Oslo al atardecer y nos recibe el sol con un cielo azul. La primera imagen que vemos es la del fiordo con numerosos barcos atracados en el puerto.

Comentamos, durante la cena, el clima tan bueno que estamos teniendo y llegamos a la conclusión que donde vamos los españoles llevamos el sol y el buen tiempo. Una velada muy agradable con risas y muy buena conversación.

Día 5.- Oslo. La capital de Noruega está situada en la costa sur en la cabecera del fiordo. Desde el año 1624 hasta el 1897 se llamó Christiania y Kristiania desde 1897 hasta 1925. El nombre original de Oslo fue recuperado en julio de 1924 y se hizo efectivo el 1 de enero de 1925. Es la ciudad más poblada de Noruega. Es una ciudad moderna, con numerosos museos sin olvidar el que tiene el original del cuadro «El grito» de Edvard Munch dedicado al artista. Su patrimonio histórico es pobre al ser, en varias ocasiones, desde la Edad Media, incendiada, aunque siempre fue reconstruida. En la segunda guerra mundial también fue objetivo clave en la invasión alemana de Noruega, ya que los nazis necesitaban ocupar el puerto para el suministro de sus tropas. A pesar de ello, consiguieron sacar del país a un número considerable de judíos. Está el monumento de las sillas en memoria de los judíos. Es muy emotivo verlas expuestas en el parque. Continuamos la visita por la ciudad viendo la original Casa de la Ópera de Oslo construida en el año 2008. Se encuentra en el centro de la capital, junto al fiordo y se puede caminar por su tejado. Una construcción realmente original.

La zona oeste es de las más bonitas de la ciudad. Pasear por sus barrios es una delicia. Edificios que parecen copiados de París o de la ciudad alemana de Dresde, según nos comenta la guía local que nos acompaña. Entrar en la ciudad con automóvil, desde el año 2019, está muy restringida, pagando cantidades importantes dependiendo del tipo de vehículo.

Desde allí nos trasladamos al parque más sorprendente que tiene esta ciudad. Se llama parque Vigeland en honor al arquitecto noruego Gustav Vigeland. El parque recoge su gran obra, más de doscientas esculturas, realizadas en piedra y bronce, relacionadas con el proceso de la vida. Cuando vi las puertas de hierro forjado de la entrada me recordó al parque de El Retiro de Madrid. Es un gran espacio de flores y vegetación en el que se puede pasear admirando las esculturas y disfrutando con tranquilidad del paisaje.

Una vez terminada la visita con la guía local, nos dirigimos a ver la ciudad por nuestra cuenta.

Oslo tiene una calle principal llamada Karl Johans que parte desde el Palacio Real y finaliza en la estación central de tren. Se llama así en honor al rey Karl Johan. Frente al Palacio Real se puede ver también una escultura que le rinde homenaje. El Palacio Real nos sorprendió por su fácil acceso y poder pasear por sus jardines. Cuando la bandera ondea encima del palacio, es la consigna para saber que los reyes están allí.

A lo largo de la calle hay numerosas terrazas y cafeterías con un día de sol fantástico, incluso con algo de calor. Hay mucho ambiente, con mercadillos de artesanía y muchas tiendas de moda. Está el Parlamento, la Catedral y el teatro Nacional.

El 10 de diciembre de cada año, en Oslo, se otorga el premio Nobel de la Paz. La ceremonia se hace en el Ayuntamiento. El edificio es muy original, modernista y se inauguró en el año 1950 aunque su construcción comenzó en 1930, pero la invasión nazi frenó su finalización.

Ha sido un día muy hermoso, en muy buena compañía, con sol y mucha luz. Quien lo diría en esta tierra de frío y nieve. El hotel nos acoge con una cena reconfortante y una agradable tertulia.

Día 6.- Nuestro viaje va llegando a su fin, dejando atrás la tierra de los fiordos. Hoy es el día que cambiamos de país. Nos dirigimos a Suecia, otro país de los que conforman los países nórdicos. Llaman a Suecia el país de las islas. Tiene 21.000 islas. La religión mayoritaria es la luterana. En concreto, vamos a Estocolmo, su capital. En el trayecto, se va viendo el cambio en el paisaje, muy diferente al que nos ha acompañado.

Hacemos un alto y nos paramos en Karlstad, una bonita y pequeña ciudad del condado de Värmland bañada por dos grandes cursos de agua natural, la del río Klara y el gran lago Vänern con su archipiélago de numerosas islas. La llaman la ciudad del sol en Suecia, al ser una de las más soleadas del país. En ella nació la primera mujer ganadora del nobel de literatura, la escritora Selma Lägerlof.

Caminamos a pie por ella y en la plaza principal nos encontramos con una estatua que representa a una mujer con una espada rota levantada en el año 1955 para conmemorar los 50 años de la disolución pacífica entre Noruega y Suecia. Nos comentan que la estatua está considerada por muchos como la más fea de Suecia. Para gustos….. jejeje

Llegamos a Estocolmo alojándonos en un céntrico hotel con estación de metro cerca. Después de acomodarnos y cenar, decidimos, parte del grupo, salir a ver y disfrutar de la ciudad por la noche. Cogemos el metro hasta el centro y nos bajamos en la estación de Gamla Stan donde se ubica el barrio del mismo nombre. Este barrio está situado en el casco antiguo de Estocolmo. Sus calles están hechas para caminar y entretenernos en todas las tiendas aunque ya están cerradas. Tiene muchas plazas con restaurantes y cafés que antes eran antiguas tabernas. A pesar de ser fin de semana, la noche no tiene demasiado ambiente, aunque sí mucho encanto pasear por sus callejuelas. Nos paramos en un café a tomar unas copas pero duró poco porque ya estaban cerrando. No nos ha importado que no hubiera mucho ambiente porque la diversión ya la llevábamos nosotros. Ha sido una noche estupenda de risas y confraternidad. Llegamos al hotel con la sonrisa en la cara encantados de la complicidad y el compañerismo que hemos tenido.

Día 7.- Estocolmo, capital de Suecia, está sobre 14 islas y tiene el tercer lago más grande de Suecia, el lago Mälar que desemboca en el mar Báltico. La primera mención de la ciudad la sitúan en el año 1252 en la pequeña isla de Stadsholmen que hoy se llama Gamla Stan y no es hasta el año 1436 que Estocolmo se proclama capital de Suecia. Actualmente, tiene unos dos millones de habitantes. Está rodeada de naturaleza al tener una tercera parte de la ciudad formada por parques. Es de una gran belleza en la que se conjuga muy bien su parte histórica y su parte moderna.

Comenzamos haciendo un recorrido por la zona más moderna de Estocolmo, su larga avenida Drottninggatan, llena de edificios modernos y centros comerciales. Esta avenida termina en la plaza Hötorget donde está la sala de conciertos más grande de la ciudad. De allí nos vamos al puerto de Stadsgärden. Aunque la ciudad tiene alrededor de siete puertos, este es el más importante de todos ellos. Es de una belleza espectacular al estar rodeado de edificios antiguos. El Palacio Real de Estocolmo es uno de ellos. Desde el Palacio hay unas vistas maravillosas del puerto. A orillas del mar Báltico vemos el museo de fotografía más importante de Estocolmo, Fotografiska.

Finalizamos la visita guiada llegando al casco antiguo de Estocolmo, Gamla Stan. A la luz del día cambia absolutamente. Las calles tienen mucha vida, mucho turista y pasear por ellas a veces se hace difícil. Nos quedamos en la plaza Stortorget donde están los preciosos edificios del siglo XVII pintados de colores muy alegres. Dentro del casco antiguo podemos ver la catedral de San Nicolás o el museo Nobel que abarca toda la historia de los premios. En el Ayuntamiento de Estocolmo que data del año 1923, es donde se celebra el banquete anual con los premiados.

El pasear por el día en esta zona de Estocolmo es totalmente diferente a la noche. Llena de vida, de gente, de tiendas abiertas en las que nos vamos parando para comprar algunos regalos. Las terrazas abiertas es otro de los atractivos de esta ciudad de gran belleza.

Después de comer fuimos paseando por los parques de la ciudad en la que albergan conciertos, mercadillos de artesanía e infinidad de terrazas alrededor de ellos. La tarde se puso algo lluviosa y nos quedamos en uno de los cafés del puerto admirando toda su belleza.

Llegamos al hotel a cenar y preparar el equipaje para el día siguiente salir hacia el aeropuerto, no sin antes tener una buena tertulia con las vivencias, las anécdotas, la magnífica convivencia que hemos tenido durante el viaje.

Día 8.- Después de desayunar en el hotel, nos recoge el autocar. Salimos rumbo a España sin retraso y llegamos puntuales.

Vamos llenos de imágenes en la retina, con un gran cariño hacia el grupo tan estupendo que hemos tenido. El viaje ha sido fantástico, pero con un añadido muy importante, la calidad humana de todos que comenzamos siendo compañeros y finalizamos siendo amigos. Inolvidable.

Autor: marylia4

Madrileña, aficionada a escribir, socialista, cinéfila, amante de la música, cocinitas, inquieta, decidida, curiosa por la vida..... y otros cuentos.

20 pensamientos en “Viaje a los Fiordos

  1. Interesante y detallada crónica, que como buen vino quiero disfrutar a pequeños sorbos. Voy a descargar la entrada para ampliar cada fotografía y no perder detalle alguno. Cuesta trabajo imaginar, que a día de hoy existan lugares con semejante virginidad y belleza natural. Te felicito de corazón y me alegro por tu viaje, tropical abrazo ❤️❤️❤️

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  2. Interesante viaje y maravillosas fotos. Un abrazo, amiga

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  3. Una verdadera maravilla de lugares, las fotografías estupendas, se ve que disfruaron
    cada momento, gracias por compartir Marylia. Esperemos que pronto hagas otro viaje
    par que lo publiques. Un gusto leerte.
    Feliz semana.
    Un abrazo.

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  4. Es uno de esos viajes que tengo pendientes 🙂 Siempre me da reparo ir en un grupo de personas que no conoces, no sé, pienso que todo puede salir mal ….

    Qué paisajes más bonitos, y encima os habéis llevado el sol con vosotros, sí … Me ha gustado mucho, las ciudades cada vez me llaman menos la atención, pero esos paisajes, buffrf

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  5. Que bueno volverte a ver querida amiga!! Hermoso viaje y fotos. Abrazos

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  6. Vaya pedazo de post que es todo un reportaje fantástico, en texto y fotos, de hecho he tomado algunos nombre porque para mi viajar a los fiordos es una de las asignaturas pendientes en Europa. Quizás tu post me haya abierto el apetito de ir allí. Aparte de las fotos, algunas son increíbles, y de tus espléndidas explicaciones, me ha gustado ese buen ambiente que ha reinado con los compañeros de viaje, porque eso es una suerte añadida. Solo puedo darte las gracias por compartir con nosotros estas maravillas. Un abrazo 😊

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    • Muchas gracias por tus palabras, amigo, me encanta que te haya gustado y te recomiendo que en cuanto puedas hagas este viaje. Estoy segura de que te va a encantar.
      El buen ambiente ha sido fundamental para tener aún mejor recuerdo. Gracias de nuevo y un abrazo.

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  7. Me encantaría ir y conocer esos preciosos paisajes. Gracias por compartir! Un fuerte abrazo

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